Pensar la impermeabilización junto al acondicionamiento térmico

La revista NEGOCIO & CONSTRUCCIÓN presenta con el número actual una edición especial dedicada a la impermeabilización, donde reune importantes artículos entorno a este tema relevante para la calidad, los costos de posventa y de mantención, la vida útil y, en suma, la sustentabilidad de la edificación.

Dedico mi contribución a la importancia del desarrollo interdiciplinario de las especialidades de impermeabilización y de acondicionamiento térmico.

Coordinación requerida de la especialidad de impermeabilización con otras disciplinas y actores. Gráfico Blender

 

No hay protección térmica sin protección de la humedad

Chile está encaminado hacia la construcción “cero carbono” y con eso responde a la responsabilidad de mitigación del cambio climático así como a la necesidad de adaptación a las condiciones climáticas y de energía que se nos avecinan.

Un requisito central es la eficiencia energética de la edificación cuyo primer paso siempre son las medidas pasivas de arquitectura y construcción.

Para avanzar desde el nivel básico actual de acondicionamiento térmico hacia estándares más altos se deben resolver varios temas críticos en la construcción de hoy, entre ellos los puntos donde la aislación térmica está especialmente expuesta a riesgos de humedad.

Recordar que más importante que aumentar el espesor del aislante es mantenerlo seco e intacto durante la vida útil del edificio.

Sobrecimiento

Un punto crítico es el aislamiento del sobrecimiento, es decir, el muro entre ±0 cm y +30 cm, que se ve afectado por la humedad de suelo, agua superficial, salpicadura de lluvia y riego. En la actualidad no hay un buen estándar constructivo nacional para esta zona.

Las terrazas en las cubiertas de los edificios pueden provocar problemas de humedad. Imagen de lifeforstock en Freepik

Terraza de cubierta

Más importante en cuanto a costo posventa (y de reputación de las empresas) son las terrazas ubicadas en las cubiertas de los edificios residenciales. La principal función del techo es la protección del agua y al mismo tiempo tiene las más altas exigencias de aislamiento térmico.

La construcción convencional de terraza consiste en la losa estructural más aislante más sobrelosa con porcelanato y lleva dos capas impermeabilizantes: la primera encima de la losa y la segunda encima de la sobrelosa. A pesar de esta aparente doble seguridad, innumerables edificios muestran filtraciones de lluvia hacia el departamento justo debajo. 

Agua acumulada a nivel de aislación térmica en una terraza de techo. Foto Blender

El problema aquí no es la impermeabilización. Es el diseño del conjunto que no logra prevenir el ingreso de agua de lluvia a la construcción. Una vez que el agua está atrapada, está sujeto a los ciclos naturales de evaporación y condensación y, además de las goteras, puede causar el levantamiento del pavimento.

¿Cuál es la solución?

Existen diferentes propuestas para solucionar el problema, tales como la instalación de aireadores o la impermeabilización de la superficie del porcelanato. Ninguna de ellas es capaz de secar el aislante o de prevenir el ingreso de agua.

El ”techo invertido” lleva la impermeabilización debajo del aislante resistente a la humedad y ofrece seguridad y flexibilidad. Imagen MAC

Lo que se requiere es un cambio completo en la configuración del techo. Aquí la tipología de “techo invertido” muestra importantes beneficios. Los más importantes son:

  • La impermeabilización se ubica en un lugar muy protegido y por lo tanto puede servir por muchos años.
  • El sistema es completamente registrable.
  • Hay flexibilidad en el diseño de la superficie y para cambios posteriores.

El “techo invertido” existe desde hace varias décadas y es una tecnología probada. Con esta solución los edificios están mejor preparados para las condiciones climáticas esperadas que con otras alternativas.

Proyecto integrado

Desarrollar una solución segura y duradera para terrazas en los últimos pisos requiere una estrecha coordinación y retroalimentación entre las disciplinas de impermeabilización y de acondicionamiento térmico, respaldadas por conocimientos de la física de la construcción.

La decisión del sistema de cubierta debe tomarse cuanto antes, ya que impacta, entre otros, en las pendientes mínimas y en el sistema de evacuación de aguas lluvia. Por lo tanto, existe una necesidad urgente de dejar atrás los procesos de planificación tradicionales y comenzar con el desarrollo integrado de proyectos, eso es interdisciplinario desde el inicio. Sólo así se podrán crear edificios sostenibles y de alta calidad.

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